MADURO Y LA RUMBA “CHARCO É SANGRE”
- Obtener enlace
- X
- Correo electrónico
- Otras aplicaciones
► “WORLD JUSTICE PROJECT”: LA VENEZUELA-MADURO: LUGAR 140 DE 140 EN EL ÍNDICE DE ESTADO DE
DERECHO
► ONU: MADURO,
ALIAS “CHARCO É SANGRE”
►
EL
INFORME COMPLETO DE LA ONU
►
BOTARON
A MADURO DEL CONSEJO DE DERECHOS HUMANOS DE LA ONU
► NICOLÁS TORTURA
EN 17 "CASAS"; CILIA CALLA
►
EL
INFORME COMPLETO DE LA ONU - HORROR EN
EL SEBIN Y LA DGCIM
► A/HRC/51/CRP.3: CRÍMENES DE LESA HUMANIDAD COMETIDOS ATRAVÉS DE LOS SERVICIOS
DE INTELIGENCIA DEL ESTADO: ESTRUCTURAS Y PERSONAS INVOLUCRADAS
►
CÓMO CUBA ASESORA A MADURO EN LA TORTURA Y REPRESIÓN
► WASH-POST: «CRÍMENES DE NICOLÁS MADURO NO DEBEN SER PASADOS POR ALTO”
Lo que significa el retroceso del Estado de derecho a nivel mundial
ilus. Miriam Kamenski - Las pancartas dicen : "Estoy enfermo" y "tengo hambre" Por quinto año consecutivo, el Índice del Estado de Derecho sigue descendiendo. Los últimos lugares los ocupan Haití, la República Democrática del Congo, Afganistán, Camboya y Venezuela de último-último, 140 en 140
DW- Es de noche. De
repente, unos hombres armados llegan hasta a la puerta para entrar y registrar
la casa. Son policías y soldados vestidos de civil que se llevan al hijo de la
familia y a su primo en un minibús sin patente.
Lo anterior, según relata la periodista ugandesa Remmy Bahati, le
ocurrió en octubre a su familia en Fort Portal, al oeste de Uganda. Bahati
cree que el gobierno ugandés quería vengarse de ella secuestrando a su hermano.
"Investigué algunas historias, lo que no le gustó al
gobierno", afirma a DW.
Lo que describe la periodista es un ejemplo de abuso de poder, de
violación de los derechos fundamentales y de la ausencia de una justicia penal
adecuada. En resumen: no existe Estado de Derecho en Uganda.
El Índice de Estado de Derecho 2022 confirma que las cosas no
van bien en el país africano. De hecho, se encuentra en el puesto 128
entre los 140 países analizados.
Desde 2009, el Índice de la organización no gubernamental "World Justice Project" mide el avance del Estado de derecho en todo el mundo, basándose en ocho factores. Para el este año, fueron encuestados más de 154.000 hogares y 3.600 expertos jurídicos.
Lo que constituye exactamente un Estado de Derecho es un tema de
constante debate. Pero hay consenso en que los ciudadanos que viven en un
Estado de derecho -a diferencia de la familia de Remmy Bahati en Uganda- pueden
confiar en que se respetarán las leyes vigentes.
Alemania en sexto lugar
Dinamarca, Noruega, Finlandia, Suecia y los Países Bajos pueden
considerarse como ejemplares. Ocupan los primeros cinco lugares en el ranking.
Alemania ocupa el sexto lugar, al no recibir las mejores calificaciones en
cuanto a la apertura de la esfera gubernamental y administrativa.
Dentro de la UE, Hungría obtiene la peor puntuación. Al final de la lista están Haití,
la República
Democrática del Congo, Afganistán, Camboya y Venezuela. En esos países,
derechos fundamentales como la libertad de expresión no están suficientemente
protegidos y las acciones del gobierno no están adecuadamente
controladas.
El ejemplo de China
demuestra que incluso aquellos países que se encuentran en la parte
media-baja de la lista pueden padecer también de un Estado de derecho débil.
Pese a que este país se destaca en la lucha contra la corrupción y en el
mantenimiento del orden y la seguridad, sigue ocupando el último lugar en la
protección de los derechos fundamentales y la separación de poderes.
Según un análisis del World Justice Project, el Estado de derecho se ha
debilitado en seis de cada diez países en el último año. Este es el quinto año
consecutivo en el que la media mundial del Índice de Estado de Derecho ha
descendido.
"Los controles al poder gubernamental están perdiendo fuerza y el
respeto de los derechos humanos está disminuyendo", afirma Elizabeth
Andersen, directora ejecutiva del World Justice Project.
La experta señala, además, que en la actualidad son 4.400 millones las personas que viven en países donde el Estado de
derecho es más débil que el año pasado.
Para la periodista Remmy Bahati la falta de un Estado de derecho en
Uganda tuvo consecuencias muy personales. Su hermano y su primo están ahora
libres, pero el miedo permanece. "Dejaron ir a mi hermano después de nueve
días sin cargos, pero le dieron un mensaje para mí. Me dijo que dejara de
tuitear sobre los derechos humanos y el proyecto de oleoducto de África
Oriental", dice.
Bahati explica que antes era mucho más confiada. Ahora tiene miedo de expresar su opinión.
- Obtener enlace
- X
- Correo electrónico
- Otras aplicaciones



Comentarios
Publicar un comentario